31 mayo 2006

Aguas turbulentas


Aguas turbulentas
Ian Rankin
The Falls
RBA Libros
470 pags.
2.000 (España 2.004)

La fiesta de jubilación de Farmer Watson da paso a una nueva etapa en la comisaría de Leith, con Gill Templer de Comisaria y Bill Pryce de Inspector Jefe.
El primer caso importante de esta nueva etapa es la desaparición de una estudiante hija de un importante banquero. Hay dos líneas de investigación, por un lado un misterioso juego de rol por internet, dirigido por el misterioso Programador, pista que va a seguir Siobhan Clarke con el detective Grant Hood primero y luego con el enviado de Claverhouse: Eric Bain apodado Cerebro, esperto de la Brigada Criminal. La otra pista es mas compleja, está basada en un pequeño ataud de juguete con una muñeca en su interior, encontrado cerca del domicilio de la secuestrada, similar a otros ataudes que se han encontrado cerca de personas desaparecidas desde 1.830. A esta pista se va a dedicar John Rebus auxiliado por la inspectora Ellen Wyllie, el forense jubilado Prof. Devlin, y Jean Burchill jefa del Departamento de Creencias Populares del Museo de Edimburgo.
Para complicar mas las cosas, el padre de la desaparecida sorprende en el apartamento de su hija al inspector Rebus, tumbado en el suelo, con evidentes muestras de ebriedad. El novio de la desaparecida lo demanda por acoso policial, el Ayudante del Jefe, el todopoderoso Colin Carswell y su acólito Derek Lindford quieren ajustar viejas cuentas con Rebus, y un periodista sensacionalista Steve Holly está dispuesto a obtener información a cualquier precio.
Esta novela, a diferencia de las precedentes, nos muestra un caso que puede tener ramificaciones diferentes, cuando anteriormente eran sucesos diferenctes que podían estar relaccionados entre sí.
Siobhan Carter se debate entre ser sumisa y ser una policía como quieren sus superiores, o ser como John Rebus, un marginado por los jefes, pero que goza de las simpatías de los compañeros. Este mismo sendero han de atravesar otros personajes somo Grant Hood y Ellen Wyllie, que pasarán de un lado a otro,en el juego que tienen Gill Templer y John Rebus.
Otros personajes secundarios de la serie tienen un pequeño papel, como Claverhouse, siempre aliado de Rebus, los forenses Curt y Devlin, el padre Leary, George Silvers, incluso un breve cameo de la ahora Diputada Seona Grieve (En la Oscuridad), para conjuntar el pequeño universo de las novelas de Rankin. Se echa en falta a Morris Gerald Cafferty y sus hombres de negocios.
A destacar el interrogatorio del banquero entre Bill Pryce y Gill Templer, donde Pryce se comporta como un elefante en una cacharrería, ante la divertida mirada de la Comisaria, y el interrogatorio del estudiante de medicina a medias entre Clarke y Rebus, en el mas puro estilo de poli bueno- poli malo.
En conjunto, bastante aceptable, desde mi primera lectura fué uno de los que mas me gustó, quizás por la historia de los ataudes de juguete.

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